Vicios

Si algún día caes en un vicio, disfrútalo. No hay mayor placer que el de sentirse presa de una fuerza tan grande que te impide ver el futuro sin ella a tu lado. Enamórate de tus vicios, porque serán los únicos que jamás te abandonarán; te llevarán de la mano hasta tus últimos días. Muchos de ellos te abrirán la puerta del otro mundo y te irás en su nombre...

Si acaso hay una forma digna de morir, esa tiene que ser siendo presa de tus más profundos vicios.

Creo que soy adicto a ti, y feliz dejaré que me tomes la mano y me lleves hasta mi muerte.

Y cuando pregunten ¿de qué murió?

que todos sepan que

fue repitiendo

tu nombre

hasta

deshidratarme.